martes, 21 de diciembre de 2010

Ensayo: PRODUCCIÓN Y COMPETITIVIDAD GENERAN VIOLENCIA.

PRODUCCIÓN Y COMPETITIVIDAD GENERAN VIOLENCIA.

INTRODUCCIÓN
Profundizar en la violencia psicológica en nuestros días debe partir de un análisis profundo de la sociedad en que vivimos.
Sociedad de consumo y producción de bienes en general que nos llevan de una manera natural a convertirnos en competidores hasta de nosotros mismos a buscar un objetivo y luego otro y así conforme vamos avanzando en nuestra vida cada meta lograda socialmente mide la felicidad de las naciones y la nuestra.
Nos han enseñado que somos seres sociales pero no nos dieron la elección de la sociedad en la que queremos vivir, ni que hacer con ella,  simplemente aquí estamos tratando de comprenderla para pasar la vida transformándola.
La sociedad en la que vivimos nos educa para sobrevivir o vivir en ella para su propio desarrollo y supervivencia de quienes se dice la manejan y todo áquel que no piense igual dentro de esa sociedad es visto como un desadaptado social y con la necesidad de reeducarlo hasta que acepte una forma de desarrollarse socialmente.
La educación está enfocada a la formación de ciudadanos útiles socialmente y se evalúa su adaptación social cada ciclo escolar aún violentando una forma de ser del individuo.
En este ensayo se habla  de  la violencia psicológica desde un punto de vista  marxista, demostrando que la violencia tiene mucho que ver con los modos de producción que Marx nos hablaba y que tal vez por eso la sociedad capitalista de su época exhibió un temor casi irracional a esas ideas y que sin embargo las usó en su beneficio para capitalizarse.
 Al destruir al crítico de la sociedad se  ha permitido la deshumanización de las sociedades actuales al grado que se compite desde el robar hasta el ser político como meta final.
Competir por competir nos enajena o en otras palabras no deshumaniza y esto genera violencia.


                                                                                                       
1.-CONCEPTUALIZACIÓN

La violencia psicológica es cualquier acción u omisión que dañe la estabilidad psicológica, que puede consistir en negligencia, abandono, descuido reiterado, celos, insultos, humillaciones, devaluaciones, marginación, desamor, indiferencia, infidelidad, comparaciones destructivas, rechazo, chantaje, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, a la devaluación o anulación de su autoestima e incluso al suicidio. Violencia es cualquier agresión que dañe la integridad de un ser vivo.
El ciclo de violencia que comienza en el hogar en donde el ser humano adquiere los principios de convivencia y las escuelas tienden a acompañar a los menores durante su proceso de maduración a la adultez. 
En la obra "tu no me entiendes" de la autora Deborah Tannen  nos habla de las diferencias entre hombres y mujeres asumiendo que somos diferentes por nuestra herencia cultural y nuestra educación en tal libro viene un experimento que hace la autora observando a dos grupos de niños jugar donde las niñas organizan todo antes de iniciar el juego y los niños marcar jerarquías. Lo cual nos expresa que la educación es influyente de nuestras actitudes violentas, ya que desde pequeños asumimos de manera diferente las relaciones sociales y al momento de interactuar esas diferencias se hacen notables en nuestras actitudes violentas, la violencia no sólo es falta de educación si no una rutina de vida que para la mayoría de las personas de determinada sociedad pasa desapercibido el ser violento, ya que es una forma de ser adquirida desde las relaciones familiares y que en la mayoría de los casos es considerada como natural.  Con esto los aprendizajes del ser humano hacen ver que la violencia es necesaria para su supervivencia dentro de una sociedad regida por la regla de producir más y mejor tanto seres humanos como servicios y sus instrumentos para lograrlo.
Muchas veces existen problemas psicológicos reales pero muchas veces son generados por la desigualdad política y social.


2.-SOCIEDAD DE PRODUCCIÓN

“La constitución es esencialmente un sistema de medición” Marx, Carlos “Critica de la Filosofía del Estado de Hegel”, Ed. Grijalbo S. A, colección 70, México, 1968. P.88.
La desigualdad política y social, a la que nos referimos, es generada cuando un pueblo está acostumbrado a consumir y a producir y del equilibrio de estas dos actividades  se enmarca el desarrollo  de un individuo, de una sociedad, de una nación ya que las familias pasan la vida compitiendo en el cómo consumir más y mejor que sus familias vecinas. De hecho quien consume más es quien tiene una mayor posición social. “La diferencia entre las clases de la sociedad civil llega a ser una diferencia politica.” Marx, Carlos “Critica de la Filosofía del Estado de Hegel”, Ed. Grijalbo S. A, colección 70, México, 1968. P.90.
 De esta manera la sociedad genera por si misma una desigualdad y anhelos o competencias por ser más que los demás no importando el cómo lo haga aunque sea atropellando las decisiones propias o las de los demás y esto se escuda en que la actuación individual, familiar,  social e incluso política en “EL QUE DIRÁN”.  Frase que resume el accionar social de la actualidad. Por el que dirán se dejan los mejores valores, por ejemplo si un automóvil me hace mejor lo compro aunque deje a mi familia sin comer; lo mismo ocurre  con el vestir, el estudiar, el trabajar, etc.…pero porque preocuparnos por el que dirán, bueno esta también es una de las actitudes que nos tienen marcados desde que somos unos niños la reputación ante la demás gente, "no hagas esto porque se ve mal" una simple actitud que la sociedad en estos tiempos tiene muy marcada 
Es la forma en que en una sociedad se desarrolla una relación de producción quiero más, produzco más y comienza con esto la explotación social dentro de la sociedad.
Ahora bien, Marx nos habla de “las relaciones de producción” nacen cuando una sociedad nace, durando lo que una sociedad dura y cuando se destruyen estas relaciones nace una nueva sociedad.
Cada sociedad de producción desarrolla los mecanismos necesarios para subsistir el tiempo necesario en que sus relaciones de producción permanezcan vigentes de esta manera el ser humano permanece “protegido para su subsistencia” en la medida en que a través de los conocimientos, hábitos, y valores adquiridos permitan el desarrollo de la sociedad en la que desenvuelve sus actividades cotidianas en donde el triunfo es medido por los logros que los individuos desarrollen para enriquecerla: un campeonato deportivo, un logro académico, etc.
El que los hombres entren en determinadas relaciones de producción, no depende de su conciencia, sino de las condiciones materiales de vida. Depende, en última instancia, del nivel de desarrollo de las fuerzas productivas y en sus habilidades para transformarla y desarrollarla.

3.-EDUCADOS PARA PRODUCIR

El ser humano por educación desde la niñez asume actitudes y parámetros de los padres, tales que al crecimiento no se ven que sean de modo incorrecto, sino de una forma natural,  pero la violencia por parte del ser humano debe ser conocida y así mismo ser reflexionada y cambiar esas “costumbres”.
“Un aspecto importante de la violencia son los recuerdos no muy positivos de la infancia, se tiene por recordar aquello que los hizo sufrir” (Enrique Gracia, Gonzalo Musitu. Psicología social de la familia, 2000)  pero porque dejar sólo marcado los recuerdos no positivos, si no, todos los recuerdos del ser humano, porque desde el hogar aprendemos diferentes cosas que en la edad adulta no reconocemos, conductas buenas o malas.
Estas conductas las tenemos marcadas desde niños en el seno familiar en donde  se nos enseña a producir: a ir al mandado, a la escuela, a jugar con los colores favoritos de un equipo o bien enfrente de un programa de televisión que vemos;  hasta querer actuar y ser como  los adultos que tenemos como modelos en nuestro crecimiento; y así, hasta al momento de llegar a la adultez seguimos haciendo esos actos que no miramos que sean o puedan ser de otra manera por ser de hecho ya naturales para nosotros y de los cuales tomamos conciencia cuando alguien externo llega a nuestra vida. Por ejemplo: si el ambiente familiar se desarrolla con padres educados profesionalmente la idea principal de los hijos es llegar a la universidad, esto es lo normal, pero si el ambiente es de una pareja de obreros la máxima de los hijos será una ciudad industrial.  De aquí que la familia marque de una manera natural las ambiciones de competir y producir y hasta los niveles de violencia que desarrollará un individuo para lograrlo. Depende de la familia la manera de ser de la sociedad.
Cuando  de pequeños nos preguntan sobre  de qué queremos ser de grandes,  siempre nuestras respuestas son bombero, policía, ama de casa, todas las profesiones de respuesta van a ser acordes a la situación que vive la familia y el asombro surge cuando un niño hace una selección   desconocida para  la familia.
Cuando jóvenes lo que vivimos ya está de cierta manera guiado hacia lo que vamos a hacer con nuestra vida y lo que aprendimos lo vamos convirtiendo en nuestras propias reglas y todo acorde a las reglas que vivimos en familia y esto es lo normal y natural para nosotros y así hasta que nos damos cuenta de que estamos dentro de un Estado- Nación con hábitos y costumbres propios.
“La relación de sustancialidad es una relación de necesidad; esto es, la sustancia aparece dividida en realidades o actividades independientes, pero esencialmente determinadas” Marx, Carlos “Critica de la Filosofía del Estado de Hegel”, Ed. Grijalbo S. A, colección 70, México, 1968. P.24.

4.-EDUCADOS PARA COMPETIR.

Queda claro que aunque en el siglo XXI se ha dicho que han cambiado los tiempos en cuestión de sociedades miramos que no es así, más bien lo que siempre ha existido solo cambia de vocabulario para referirse a lo mismo con otros nombres no tan abrumadores para entender entre el pueblo pero sigue siendo lo mismo, por ejemplo: la lucha de clases sociales para Marx es ahora la  competencia para la excelencia en las instituciones y o bien la clase social se mide de acuerdo a la calle o colonia en la que vives, la tienda de raya en la época de Porfirio Díaz  es ahora el tipo de tarjeta bancaria que usas para cobrar tu salario en un banco. Y la competencia ahora se enmarca en ser excelente  o bien presentarse en un banco y formarse en la línea en donde atienden a la tarjeta internacional dorada en la pobrecita para recoger la nómina.
Desde que nacemos poco a poco vamos creciendo con la educación de la clase social marcada en la frente, donde un niño pide tal juguete y los papás dicen no se puede somos “pobres”,  ahora bien a los adolescentes se les dice “estudia hijo para que no seas pobre” cuando el estudio ya no garantiza nada, eso en una cultura pero cuando se educa en una escuela de determinada clase social se aprende a que si no se estudia no se sabe mandar y puedes terminar en la pobreza; otro claro ejemplo es de que al pueblo lo educan como quiere el estado, estudiar para que seas tu propio jefe, bueno sin recordar que si eres pobre, .¿de donde vas a sacar el capital? O te endeudas con el estado para ser “tu propio jefe” que recordando tendrás que pagar la deuda si, no tendrás quien te mande, pero si tendrás una deuda grande y con intereses, o trabajar doble tiempo, un salario para ahorrar y juntar un dinerito para después invertirlo y el otro salario para sobrevivir, ahora bien Marx nos habla que la magnitud del salario está determinada por el valor de los medios de subsistencia del obrero y de su familia, vale decir por el precio de aquellos bienes que el obrero y su familia deben consumir para sobrevivir. En  otras palabras si eres rico gasta sin fijarte, si eres de clase media no te endrogues por más del 30% de tu salario y si eres pobre raciona lo que encuentres.
Todo lo anterior nos muestra que la competencia comienza en la familia, se desarrolla en la escuela y se vive en la sociedad y que la forma en que se manifiesta puede ser constructiva o destructiva pero ambas pueden generar un tipo de violencia. Siempre debemos tener una competencia sana, pero al fin competencia para ser mejor que los demás porque sobresale el que sabe competir bien o mal, honestamente o no, con justicia o injusticia.
Sólo el que obtiene buenas calificaciones en la universidad gana un puesto en tal o cual empresa (eso si no se tienen influencias).





5- PRODUCCION Y COMPETENCIA

Producción y competencia son dos elementos de nuestra sociedad que nos mueven a estudiar y trabajar para ser más competentes, dominar más herramientas tecnológicas con la finalidad de producir más eficazmente para hacer del estudio o trabajo algo productivo.
El hecho de que existan muchos seres compitiendo en diversas ramas o tareas desarrollan en las sociedades diversas formas de violencia: psicológica, social, formativa, de las cuales la más preocupante es la psicológica ya que afecta al individuo y es la principal forma de denigración personal y la más difícil de detectar para poder eliminarla.
“al convertir su propia producción en su privación de realidad, en su castigo, y su propio producto en su pérdida en un producto que no le pertenece, engendra con ello la dominación de quien no produce sobre la producción y el producto. Al enajenarse su propia actividad, hace que el otro, el extraño, se apropie de la actividad ajena.” Marx, Carlos, Manuscritos económicos filosóficos de 1844, Grijalbo, colección 70, México, 1968. P.84-85.
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La violencia Psicológica en la sociedad es producida por nuestras propias costumbres y hábitos de vida, pero ésta no es previsible  cuando estas reciben informaciones contradictorias a lo que se vive, por ejemplo,  se dice estar en contra de la violencia pero se  permiten tales programas de televisión, se realizan novelas, películas, libros que permiten el desarrollo de la violencia sin carga de conciencia ya que van deformando la sociedad de tal manera de que la violencia entra en el programa de competitividad y  entonces hasta el delinquir se convierta en un reto a las capacidades humanas y en donde el que delinque es el héroe, ya no como Robin Hood quien robaba con el noble propósito de dar a los pobres el producto de lo robado, sino que ahora la idea es enaltecer al que roba y tontear al que es robado. En otras palabras las sociedades productivas y competitivas están perdiendo el sentido del valor. Por ejemplo: se pide legalizar la droga por alto consumo, es decir, ciertos hábitos que eran vistos nefastos por agredir la salud ahora son vistos de manera natural porque la sociedad los realiza cotidianamente.
Se compite para producir los elementos necesarios para que subsista una sociedad o formar determinada sociedad y ya no interesa el cómo ni a quien afecto sólo se trata de producir.

La información que se recibe por diversos medios: revistas, televisión, radio, periódicos y el Internet quienes son los que manipulan la sociedad, deciden lo que vamos a comprar y usar, en lo que vamos a trabajar, a lo que nos dedicaremos en nuestros tiempos libres si es que los tenemos;  permiten publicidad con contenidos “subliminales” contenidos que marcan al individuo o futuro comprador el qué comprar, comprar y mas comprar sin darse cuenta o es lo que nos hacen ver que ellos no están enterados que en esta lucha de competencias que nos dictan, generan la violencia, porque al querer ser o tener más que los otros humillamos a los demás, que en la pelea de tener lo “mejor” causa desigualdades sociales que generan problemas entre familias, vecinos o simplemente conocidos.
Se educa para producir los recursos humanos que permitan a quienes dictan las políticas, subsistir en el poder.
“La producción no produce al hombre solamente como una mercancía, la mercancía-hombre, el hombre en función de la mercancía, sino que lo produce, además precisamente en esa función como un ser deshumanizado tanto espiritual cuanto físicamente”. Marx, Carlos, Manuscritos económicos filosóficos de 1844, Grijalbo, colección 70, México, 1968. p92.
“La transformación del interés particular en interés general tampoco es una ley consciente del Estado, sino una ley traída por el azar, realizándose contra la conciencia” Marx, Carlos “Critica de la Filosofía del Estado de Hegel”, Ed. Grijalbo S. A, colección 70, México, 1968. P.72.




CONCLUSIONES
1.-La violencia psicológica  es cualquier agresión que dañe la integridad individual de un ser vivo. Estas agresiones se desarrollan en la interacción del individuo dentro de una sociedad. La violencia psicológica es la más difícil de detectar sin embargo por el tipo de sociedad tiende a verse de manera natural.
2.-La forma de vida social genera en si misma un tipo de violencia ya que enmarca a los seres humanos en una competencia para producir y competir entre ellos mismos de una manera en la que se busca ser el mejor en todos los aspectos y en la que el individuo es capaz de perder su identidad deshumanizándose para servir al sistema social.
3.-Las relaciones de producción las enmarca el tipo de sociedad que se vive y esas relaciones condicionan el actuar y los objetivos de vida de los seres humanos, en donde la compra de un bien está por encima de la satisfacción de las necesidades básicas.
4.-Los seres humanos desde su nacimiento se desarrollan en ambientes de competencia, se compite para sobresalir entre los demás y esto desarrolla violencia. Una violencia permitida pero al fin de cuentas violencia psicológica que se manifiesta en las relaciones sociales de un individuo.




REFERENCIAS

Marx Carlos.
Manuscritos económicos filosóficos de 1844
Ed. Grijalbo, colección 70   
México, 1968.
p 160.

Marx, Carlos.
“Critica de la Filosofía del Estado de Hegel”
Ed. Grijalbo S. A, colección 70,
México, 1968.
P.88.

Gracia Fuster, Enrique y Musito Ochoa, Gonzalo.
Psicología Social de la Familia.
España 2000
Ed. Paidos Iberia, S. A.
pp. 205



Tannen, Deborah
“TU NO ME ENTIENDES” ¿Por qué es tan difícil el dialogo hombre-mujer?
2ª Ed. Javier Vergara Editor, s.a. Tacuari 202-p
Buenos Aires, Argentina 1991
Pp. 331





1 comentario:

  1. Rocio: me parece que tu blog es muy bueno, felicidades. Es muy importante que corrijas la forma en la que citaste en el ensayo. Tu calificación del semestre es 10

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